La Sala Ravelo del Teatro Nacional Eduardo Brito se prepara para recibir, a partir del 4 de julio, la producción teatral «La Lechuga», una obra escrita por el dramaturgo venezolano César Sierra que promete explorar con humor incisivo los vínculos familiares, la vejez y la muerte. La puesta en escena contará con las destacadas actuaciones de Mateo Gómez, Sabrina Gómez, Miguel Alcántara, Carmen Rosa Molina y Carlos Espinal, quien también dirige esta producción.
Durante una rueda de prensa realizada este lunes, 24 de julio, Carlos Espinal compartió detalles sobre esta nueva versión de «La Lechuga», destacando que es una obra más contemporánea que cuando se estrenó hace más de 20 años en Nueva York bajo la dirección de Nelson Landreau. «La Lechuga ha sido presentada en múltiples escenarios alrededor del mundo, pero esta versión incorpora elementos actuales que la hacen aún más relevante para el público de hoy», comentó Espinal.
Un elenco de estrellas
Mateo Gómez, conocido por su trayectoria en el cine, teatro y televisión en Estados Unidos, se une al elenco interpretando uno de los hermanos Martínez. «Es un honor regresar a los escenarios dominicanos con una obra tan rica en contenido emocional y humorístico», señaló Gómez. Por su parte, Miguel Alcántara expresó su entusiasmo por formar parte de esta producción, resaltando el aprendizaje que ha adquirido a lo largo de los ensayos.
Sabrina Gómez, quien dará vida a Virginia, destacó la intensidad de los ensayos y su expectativa de que su personaje brille en escena. «Ha sido un proceso retador, pero muy gratificante. Estoy segura de que el público se identificará con los dilemas y emociones de los personajes», afirmó.
Carmen Rosa Molina, actriz y productora de la obra, rememoró su trayectoria en el teatro y expresó su satisfacción por trabajar bajo la dirección de Carlos Espinal. «Es un privilegio ser parte de esta obra y compartir escenario con actores tan talentosos», comentó Molina.
La tragicomedia de la Familia Martínez
«La Lechuga» es una tragicomedia que narra la reunión de los hermanos Martínez y sus parejas en el día del cumpleaños de su padre, quien lleva nueve años en un delicado estado de salud. Lo que comienza como un encuentro familiar termina desatando viejos rencores y frustraciones, en una noche que promete ser diferente a todas las anteriores. «Es una obra que navega entre la comedia y el cinismo, enfrentándonos a temas profundos con una dosis de humor que nos hace sentir seguros», explicó Espinal.